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Habilidades blandas y desarrollo

A partir de la obra “Habilidades Profesionales” de Wilfredo Pérez Ruiz

Mucho me complace compartir el reciente y documentado artículo de Gracia Pinillos Nepochatyj acerca de mi publicación “Habilidades Profesionales” (2025). Un aporte enriquecedor, reflexivo y con un exhaustivo análisis en el que destaca la actualidad de este texto.

Por: Gracia Pinillos Nepochatyj (*)

Publicado: hace 4 horas

Introducción

En el mundo contemporáneo, caracterizado por una creciente exigencia emocional, social y profesional, las habilidades blandas han adquirido una importancia central en el desarrollo integral de las personas. En su libro Habilidades Profesionales, Wilfredo Pérez Ruiz reúne una serie de reflexiones que subrayan la urgencia de prestar atención a competencias humanas que trascienden lo técnico. A través de artículos temáticos, el autor nos invita a valorar el impacto de la autoestima, la empatía, el temperamento, las habilidades sociales, la comunicación asertiva y la inteligencia emocional en la construcción de relaciones saludables y contextos laborales eficaces.

Habilidades blandas y el mercado laboral

Pérez Ruiz parte de una crítica habitual en el entorno profesional: la excesiva prioridad que se da a las habilidades duras frente a las blandas. Muchos profesionales fracasan en procesos de selección o se estancan laboralmente no por falta de conocimiento técnico, sino por deficiencias en comunicación, empatía o inteligencia emocional. La obra enfatiza que habilidades como la colaboración, la tolerancia, la persuasión y el liderazgo no solo son valiosas, sino decisivas para la evolución profesional.

La autoestima como pilar del desarrollo

Una sección destacada del libro se enfoca en la autoestima, definida como el sentimiento valorativo que una persona tiene sobre sí misma. Esta se desarrolla desde la infancia y se fortalece (o debilita) a través de la interacción con padres, tutores y el entorno cultural. El autor observa que una autoestima saludable incrementa la seguridad, la expresión emocional y la toma de decisiones, mientras que una baja autoestima puede derivar en miedo, sumisión y evasión. Esta debilidad personal se refleja también en contextos profesionales, donde muchas personas evitan dar su opinión o asumir responsabilidades por temor al rechazo.

Cultura y autoestima: herramientas de superación

Pérez Ruiz argumenta que la cultura es una herramienta esencial para fortalecer la autoestima y la identidad. La lectura, el arte, los viajes y la reflexión intelectual enriquecen el espíritu humano y fomentan el pensamiento crítico. La cultura ayuda a las personas a conocerse mejor y a proyectarse con claridad hacia el futuro. El autor destaca que una sociedad que valora la cultura es más capaz de generar ciudadanos seguros, críticos y emocionalmente estables.

La empatía como necesidad social

Uno de los puntos más innovadores de la obra es su enfoque sobre la empatía. Definida como la capacidad de comprender y compartir las emociones del otro, la empatía es vital para la resolución de conflictos y la construcción de comunidades humanas más tolerantes. No obstante, el autor también señala su “inconveniencia” en ciertos contextos, donde ser empático puede percibirse como una amenaza para estructuras autoritarias o poco humanas. Aun así, insiste en que fomentar la empatía es una tarea urgente y transformadora.

Temperamento: entender para mejorar

El texto retoma las clásicas tipologías de Hipócrates para explicar cómo el temperamento condiciona nuestras reacciones emocionales. Saber si uno tiene un carácter flemático, bilioso, melancólico o sanguíneo permite identificar patrones de conducta, virtudes y limitaciones. El autor promueve la autorregulación emocional como herramienta para mejorar la convivencia, destacando que el temperamento puede y debe trabajarse para no obstaculizar el progreso personal o colectivo.

Las habilidades sociales como motor de interacción

Otro apartado esencial del libro trata sobre las habilidades sociales, entendidas como el conjunto de capacidades para relacionarse de manera efectiva con los demás. El autor diferencia entre habilidades básicas (saludar, agradecer, integrarse) y complejas (asertividad, manejo de conflictos, expresión emocional). Señala con preocupación cómo estas habilidades están en retroceso, incluso en profesionales altamente calificados, debido al creciente aislamiento social y el individualismo.

Inteligencias múltiples: una visión más completa del talento

Siguiendo la teoría de Howard Gardner, Pérez Ruiz defiende que no existe una sola forma de inteligencia. Destaca la importancia de la inteligencia lingüística (capacidad de comunicarse), la interpersonal (entender a los demás) y la intrapersonal (conocerse a uno mismo). Estas inteligencias son esenciales en contextos sociales y laborales, y muchas veces marcan la diferencia entre un líder eficaz y un técnico talentoso, pero emocionalmente ineficaz.

Asertividad en la comunicación

El ensayo también aborda la comunicación asertiva como un componente clave del perfil profesional. La capacidad de expresar pensamientos con respeto, firmeza y empatía contribuye a una mejor imagen personal y al fortalecimiento de relaciones laborales. El autor critica tanto la comunicación sumisa como la agresiva, promoviendo la asertividad como equilibrio emocional y herramienta de resolución de conflictos.

El peritaje psicológico como herramienta preventiva

Finalmente, Pérez Ruiz propone el uso del peritaje psicológico para evaluar los perfiles emocionales de individuos en contextos familiares y empresariales. Considera que muchas disfunciones laborales o sociales podrían evitarse si se prestara atención a rasgos como la autoestima, la empatía, el autocontrol o la salud emocional en general. Esta evaluación permitiría construir equipos humanos más equilibrados, empáticos y productivos.

Conclusión

Habilidades Profesionales es una obra que invita a revalorar lo humano en un mundo obsesionado con lo técnico. A través de una escritura clara y reflexiva, Wilfredo Pérez Ruiz demuestra que las habilidades blandas no son un “extra” en la formación de una persona, sino una parte esencial de su éxito y bienestar. En un tiempo marcado por la incertidumbre, el estrés y la inestabilidad, cultivar la inteligencia emocional, la empatía, la autoestima y la cultura se convierte en un acto de responsabilidad individual y colectiva. En definitiva, el mensaje del autor es claro: solo desarrollando nuestras dimensiones emocionales y sociales estaremos realmente preparados para vivir, convivir y prosperar.

Tuve la oportunidad de leer Habilidades Profesionales y sinceramente me sorprendió la claridad con la que aborda temas que muchas veces se dejan de lado en la formación profesional. A lo largo del libro, el autor pone sobre la mesa conceptos como la empatía, la autoestima y la comunicación asertiva, no como simples habilidades “deseables”, sino como elementos clave para crecer tanto personal como laboralmente.

Lo que más valoro es que no se trata solo de teoría, sino de una invitación a mirar hacia adentro, a trabajar en uno mismo para poder convivir y liderar mejor. Es un texto que se siente cercano, que no impone, pero que sí provoca reflexión. Por eso, más allá de lo académico, recomiendo su lectura a cualquier persona que quiera desarrollarse de forma más completa, con equilibrio entre lo técnico y lo humano.

(*) Estudiante de Comunicación Integral del Instituto San Ignacio de Loyola (ISIL) y con certificaciones en comunicación interna, redacción, filosofía, escritura, inteligencia artificial generativa y fotografía digital.


Escrito por

Wilfredo Pérez Ruiz

Docente, comunicador y consultor en protocolo y ceremonial, etiqueta social, ética profesional, atención al cliente y técnicas de exposición


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